Era un delantero implacable, capaz de jugar por el centro del área, cabecear y definir, jugar de segundo punta o «falso nueve», al aprovechar su estatura y su movilidad para recibir de espaldas y encarar al gol, además de conectar con el mediapunta. Estrictamente hablando, Cruyff desempeñaba labores de delantero centro en este sistema, pero él aprovecharía su profundidad para engañar a sus marcadores o de repente caer a bandas con efecto devastador, chaqueta real madrid algo nunca visto en un delantero hasta aquella época.